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* Adelantan AMLO, Adela Román y Félix Salgado

 

ROBERTO RAMÍREZ BRAVO   /

 

Acapulco, 01 de julio de 2018. El lema lo dice: Juntos haremos historia.

Por donde se le vea, el pueblo de México escribió ayer una página importante en la historia del país: por primera vez un hombre venido de la izquierda gobernará la nación entera.

Tuvieron que pasar 18 años para que Andrés Manuel López Obrador pudiera ganar la presidencia de la República, y en el ínter, un fraude descarado que encumbró al panista Felipe Calderón Hinojosa, el hombre del “haiga sido como haiga sido”; y luego, seis años más tarde, otro fraude, quizá no tan brutal como el anterior, pero en el que sí tuvieron parte activa los hombres de los negocios en México, las tarjetas Soriana y Monex.

Este domingo, el ahora ex candidato de la coalición Todos por México, José Antonio Meade Kuribreña, fue el primero en felicitarlo y reconocer su triunfo. “Él (López Obrador) tendrá la responsabilidad de conducir el poder ejecutivo, y por el bien de México, le deseo el mayor de los éxitos”, dijo.

Más tarde, el candidato de la otra coalición, Ricardo Anaya, también le habló para felicitarlo, y luego envió un mensaje público. “Como ya lo hice vía telefónica hace unos minutos que hablé con él, reconozco su triunfo, le expreso mi felicitación y le deseo el mayor de los éxitos por el bien de México”, señaló.

En Guerrero también se dejó sentir la misma tendencia: para Félix Salgado Macedonio y Nestora Salgado García en la senaduría, el último recuento del PREP daba 48.79 por ciento, para Beatriz Mojica, 23.38, y para Manuel Añorve, 21.87; mientras que para Adela Román en Acapulco, el PREP daba 44.41 por ciento; para Ricardo Taja, 22.31, y para Joaquín Badillo Escamilla, 12.45 por ciento..

En el zócalo, después de las 10 de la noche, los candidatos de la coalición Juntos Haremos Historia celebraron lo que se veía como un triunfo aplastante de estas candidaturas, ante el silencio de los priistas y perredistas, hasta ese momento. El candidato del PRI, Ricardo Taja, había anunciado una conferencia de prensa nocturna que luego ya no se confirmó y finalmente no se realizó.

Cerca de la media noche, Joaquín Badillo Escamilla se comunicó telefónicamente con Adela Román Ocampo, a quien le expresó su reconocimiento a su triunfo. Román Ocampo expresó que fue una llamada respetuosa y ella se comprometió a aprovechar la experiencia de Badillo en materia de seguridad.

Durante la jornada electoral hubo incidentes menores que no pusieron en riesgo la elección. Pese a lo que se temía, no hubo, al menos en el caso de Acapulco, incidentes violentos. Solo el retraso en la apertura de algunas casillas, y tanto el PRD como Morena denunciaron operaciones de compra de voto por parte de priistas, y acarreo, en particular hacia las casillas especiales, que se mantuvieron con una alta afluencia.

En el zócalo, en la casilla especial ubicada cerca de la catedral, hubo un incidente porque al parecer hubo reparto de boletas dobles para presidente municipal, lo que habría generado que se descuadraran los paquetes, y luego se tuvieron que cancelar alrededor de mil actas porque solo había cuatro de las cinco boletas.

En el festejo nocturno de Morena, estuvieron todos los candidatos, entre ellos Félix Salgado Macedonio, quien planteó que con el triunfo de López Obrador, de Adela Román, y los que contendieron por el Senado, las diputaciones federales y locales, el próximo gobierno tendrá relaciones institucionales con el gobernador Héctor Astudillo, pero en una forma distinta.

Ahora, dijo, se le aprobarán sus presupuestos, pero a cambio tendrá que orientar recursos para Acapulco, y para las regiones y sectores que se necesiten, además de que tendrá una mayor vigilancia.

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